Como en todos los deportes, es muy importante un buen calentamiento antes de nadar.
Además cuando nadas te vas a sumergir en agua que está más fría que tu cuerpo y vas a usar casi todos tus músculos, así que tienes que calentar todos por partes.
Ganarás flexibilidad al nadar y evitas que te duelan los músculos durante la natación y sobretodo al terminar.
Zonas que debes calentar antes de nadar
Las partes más importantes que tienes que calentar antes de nadar son
- Brazos
- Hombros
- Espalda
- Pecho
- Piernas
Ejercicios de calentamiento antes de nadar
Haz esta rutina de calentamiento antes de la natación.
El tiempo que debes sostener cada estiramiento para que los músculos se estiren bien es de 10 a 30 segundos.
Si sientes mucho dolor en alguno de estos movimientos resta algo de intensidad hasta que te sientas más cómodo.
Calentamiento de hombros
- Gira el hombro derecho dejando el brazo recto, alternando vueltas hacia adelante y hacia atrás. Repítelo con el izquierdo
- Hazlo con los dos hombros a la vez.
Calentamiento de brazos
- Levanta los dos brazos estirados a la vez de forma lateral, dibujando un círculo que termina en tu cabeza.
- Levanta un brazo hacia adelante mientras levantas el otro hacia atrás. Alterna los dos movimientos.
Calentamiento de piernas
- Inclínate como si fueras a tocarte los pies con las rodillas flexionadas. Quédate inclinado. Poco a poco pon las piernas rectas, tensando muslos y gemelos, y las vas juntando.
- Apoya el pie en un escalón elevado. Pon la pierna recta, flexiona el pie hacia tí y trata de tocar la punta con las manos.
Calentamiento de espalda
- Como si fuera una persiana, enrolla el torso hacia abajo dejando caer los brazos.
- Desenróllate despacio hasta que quedes otra vez derecho.
Calentamiento de pecho
- Ponte frente a un muro y apoya la palma de la mano con el pulgar apuntando al techo.
- Gira el pecho hacia el lado opuesto a la mano apoyada hasta que notes que estiras el brazo y el pecho. Repite con la otra mano.
Conclusion
Esta rutina de calentamiento antes de nadar es sencilla y funciona muy bien. La flexibilidad que te da hace que aproveches el entrenamiento desde el primer minuto de natación.
Yo suelo intercalar algún paseo alrededor de la piscina entre el calentamiento de una zona y otra. Así hago un calentamiento extra que me prepara mejor para el impacto del agua fría.
Para sostener bien las posturas es fundamental que respires profundamente acompañando la duración de cada movimiento.
No tienes que tensar al límite en cada estiramiento que hagas antes de nadar, pero ten en cuenta que si sientes un poco de dolor es normal, si no no llegarías a estirar de verdad los músculos.