Hay tres cosas que puedes hacer para nadar más rápido y mejorar (y son las mismas para todos los estilos).
- Disminuir la resistencia
- Aumentar el impulso
- Entrenar más rápido
Te explico primero cómo se trabaja la resistencia y el impulso para nadar más rápido a crol y después te cuento las particularidades del estilo braza.
Nadar más rápido a crol
Para reducir la resistencia al agua que ofrece tu cuerpo y ganar impulso nadando a estilo libre tienes que:
Corregir tu postura
Mira siempre al fondo de la piscina para mantener tu cuerpo lo más horizontal que puedas.
Cuando lo estás haciendo bien tienes la sensación de estar nadando cuesta abajo.
Girarte más en cada brazada
Cuanto más te gires más reduces la cantidad de espacio que ocupas en el agua, y por lo tanto la resistencia.
Minimizar las patadas
Las patadas al agua debes hacerlas manteniendo la horizontalidad de tus piernas respecto a tu cuerpo tanto como sea posible.
Si haces el movimiento demasiado abierto creas una resistencia que anula el impulso que quieres tomar.
Perfeccionar la brazada
Para aumentar el impulso tienes que saber colocar tus dedos, palmas y brazos en las distintas fases de la brazada:
- Entrada: los dedos entran en el agua en ángulo de 45 grados.
- Extensión: estiras el brazo desde la punta de los dedos hasta el hombro.
- Agarre: tus dedos comienzan a empujar el agua hacia abajo y tan pronto como puedes formas un ángulo recto con el antebrazo para abarcar cuanta más agua mejor
- Tirón: empujas el agua hacia atrás con el antebrazo y la mano y te deslizas a través del agua hasta que sacas el brazo y comienza otro ciclo
Nadar más rápido a braza
Para ganar velocidad a braza ten en cuenta estos consejos:
Cuerpo en línea recta
Entre brazadas tienes que recuperar cuanto antes la posición recta con la cabeza mirando al fondo y con las caderas tan levantadas como puedas en todo momento.
Brazada amplia
La brazada empieza con las manos juntas palmas afuera.
Cuando las separas sobrepasando la altura de los hombros comienzas a empujar hacia abajo.
Es el momento de salir a respirar y volver a sumergirte para terminar de empujar hacia abajo y hacia atrás.
Evita llevar los codos hasta las costillas y regresa rápido a la posición en línea recta.
Evita sumergirte demasiado
Tienes que mantenerte en la superficie o perderás un montón de impulso
Entrena los muslos
El momento de más resistencia al agua es el de flexionar las piernas hasta tocar las nalgas con los talones.
Si fortaleces los muslos consigues hacerlo más rápido y pierdes menos impulso.
No abras mucho la patada
En el momento de impulsarte con las piernas no debes separar los pies más allá de la altura de los hombros, eso crea resistencia al agua.
Entrena más rápido
Una vez que has perfeccionado la técnica de la resistencia y el impulso lo que te queda es centrar el entrenamiento en hacerlo cada vez más rápido.
Repetir y más repetir.
Hay un par de trucos que me permitieron progresar un montón, como dejar tiempo para recuperarte entre cada repetición y acortar las distancias en el entrenamiento, que te permite mantener y superar la velocidad con que encadenas los movimientos.
Y no olvides de hacer un buen calentamiento antes de nadar.
Conclusión
Una técnica depurada es fundamental para nadar más rápido sin cansarte de más, porque la energía que pones en cada movimiento se aprovecha de una forma eficiente