¿Se Puede Nadar Después de Comer? Mitos, Ciencia y Recomendaciones

niña triste por no nadar después de comer

Si estás nadando con fines recreativos no tendrás ningún problema al nadar después de comer.

Si realizas una clase de natación, aquagym o un entrenamiento intensivo en la piscina es más seguro esperar una hora.

Es decir, para el 99% de las personas lo de esperar 90 minutos es un mito que pasa de padres a hijos.

Esto lo corrobora la Cruz Roja Estadounidense al publicar una revisión científica que concluye que la información actualmente disponible sugiere que comer antes de nadar no provoca ahogamientos.

Mientras nadas la desviación del flujo sanguíneo al estómago, puede disminuir temporalmente el flujo a los músculos y provocar algunos calambres. 

Pero esto sucede en un ejercicio intensivo.

Para nadar un poco en la piscina o meterte en el agua de la playa no te ve a suceder.

¿Qué relación existe entre nadar y comer?

Saber cuándo y qué comer puede marcar la diferencia en la cantidad de calorías que quemas y en la eficacia de tu entrenamiento.

Aquí te dejo algunos consejos sobre cómo combinar de manera efectiva la alimentación y la natación: 

Come para tener energía al nadar

Media hora antes de nadar, ingiere una combinación de carbohidratos y proteínas. Los carbohidratos te darán energía y la proteína mantendrá esa energía. 

Te sugiero una taza de yogur con fruta o una barrita de cereal.

Rompe tu ayuno.

Si nadas a primera hora de la mañana, es importante que rompas el ayuno antes de hacer ejercicio. 

Cuando comes antes de hacer ejercicio, quemas calorías de forma más eficaz.

Si no toleras un gran desayuno, puedes comer un plátano o una manzana pequeña para activar tu metabolismo.

Cuida tu hidratación.

Si tu práctica de natación dura más de una hora, ingiere una bebida deportiva o come una fruta para mantener tu nivel de azúcar en la sangre.

Evita los jugos de frutas envasados y los refrescos con alto contenido de azúcar.

Elige alimentos saludables.

Que realices una práctica intensiva de natación no significa que puedas comer lo que quieras.

Controla lo que comes después de nadar y elige alimentos saludables que respalden el trabajo que estás haciendo en la piscina.

¿De dónde vino el mito de que es malo nadar después de comer?

Todo parece remontarse al año 1908 y a un manual de los Boys Scouts.

Este manual aseguraba que los niños debían esperar al menos 90 minutos después de comer para nadar, porque existía la posibilidad de que se ahogaran.

Una idea que lamentablemente ha persistido durante más de 100 años.

No hay ninguna razón real para evitar nadar después de comer. Y si debes realizar tus clases de natación, es saludable ingerir algunos alimentos ricos en carbohidratos y pobres en grasas.

Así obtendrás las energías necesarias para poder nadar sin sufrir calambres y mareos.

Conclusión

Si quieres darte un chapuzón en la piscina o en el mar puedes hacerlo perfectamente después de comer.

No te ahogarás ni sufrirás un calambre.

Y si realizas una práctica rigurosa de natación recuerda que es importante que te mantengas hidratado y que realices pequeñas ingestas de alimentos, como un plátano, una tostada de pan integral con queso o un yogurt natural.